Manuel Cáceres Artesero, conocido por todos como Manolo el del Bombo, está a punto de dar a luz al espíritu futbolero en el Hospital General de Ciudad Real, donde ha sido ingresado esta madrugada tras experimentar las primeras contracciones fuertes.
Está muy animado
«Si ponías la mano en el bombo notabas ya las patadas, incluso te pinchaban los clavos de las botitas», explica la esposa de Manolo mientras prepara la canastilla. El propio hincha admitía hace días que tenía el bombo más tenso de lo habitual: «Siento que Mestalla», comentaba.
Los jugadores del Valencia C.F. han acudido al centro hospitalario de buena mañana para interesarse por la salud de Manolo el del Bombo, que estará fuera de juego lo que queda de temporada.
El personal sanitario ha tenido la deferencia de permitirle conservar la boina, el cachirulo y el escudo de España pese a haberse adentrado ya en el área del hospital. «Está muy animado, con ganas de apuntarse el tanto», declara uno de los médicos.
«Si aplica todo lo aprendido en la preparación física romperá aguas en nada y nos dará un baño», insisten los expertos, que admiten que, aunque no hay rival pequeño, el hecho de que Manolo fume puede hacer que el peso sea menor de lo habitual.
A pesar de que lleva varias horas sufriendo contracciones, los médicos aseguran que aún no está en tiempo de prórroga y que en cualquier momento puede dar la sorpresa.
A primera hora de la mañana, Manolo el del Bombo seguía empujando con fuerza y animándose a sí mismo al grito de «Oé oé oé oé».