Son muchos los que aplauden la decisión de la Iglesia pero al mismo tiempo se preguntan si habrá que esperar tanto para que ésta admita también la existencia del indie rock. El padre Almunia lo tiene claro: “El indie nunca ha existido porque, para empezar, es una etiqueta que corresponde más al sistema de distribución y a la afinidad con ciertas discográficas pequeñas que al estilo musical en sí. Y la Iglesia se mantiene al margen de ese tipo de circunstancias que no forman parte de la música. Con el post punk revival no hay tanta duda porque Su Santidad es muy aficionada a Franz Ferdinand”.
Superado el dilema del punk rock, todas las energías de la curia vaticana se centran ahora en determinar si es necesario distinguir a los autobuses de los autocares «dado que su aspecto externo es prácticamente el mismo».