Apenas unas horas ha tardado el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en reaccionar después de que se hiciera público el primer caso de presunta corrupción en la adquisición de material sanitario durante la pandemia con contratos del Gobierno. «No cabe ponerse de perfil, el asunto es grave y quien les habla es, y era entonces, el máximo responsable del Ejecutivo», ha reconocido esta mañana el mandatario en una rueda de prensa ofrecida en el Palacio de La Moncloa.
«Les comunico que presento ahora mismo mi dimisión», ha sentenciado el presidente, dejando pasmados a los periodistas y a los integrantes de su propio gabinete, cuyas caras evidenciaban que la decisión no se les había comunicado previamente. «No sería de recibo actuar como han hecho otros, negando lo ocurrido y aferrándose al cargo con soberbia», ha agregado en clara referencia a Isabel Díaz Ayuso. «Estamos hablando de un enriquecimiento ilegítimo mientras morían miles de personas en uno de los trances más duros de la historia reciente de este país. Siento que no puedo continuar, no estuve a la altura de lo que cabe esperar de un presidente del Gobierno», ha argumentado Sánchez. «Y espero que mi ejemplo cunda. No caben medias tintas», ha zanjado.
Después de ocho segundos de tenso silencio, el presidente ha vuelto a tomar la palabra: «Dicho lo cual, les comunico también que este Gobierno ha decidido amnistiar al expresidente del Gobierno, quien les habla, considerando prioritario el avance en la protección de los derechos sociales y el freno a la ultraderecha que viene ejerciendo con su mandato, entendiendo que la convivencia y las políticas de izquierdas no deben ser sacrificadas porque la principal perjudicada sería la propia ciudadanía».
Pedro Sánchez, pues, ha dimitido durante ocho segundos y ha anunciado que recuperaba su cargo inmediatamente después. Desde el Gobierno consideran que «ya han sido depuradas, y al más alto nivel, todas las responsabilidades atribuibles al escándalo del asesor de Ábalos» y animan a «centrarse ahora en los asuntos que importan en el presente: continuar y afianzar la regeneración democrática y la convivencia en nuestro país».