Contundente decisión de Estados Unidos para regular los tiroteos masivos en escuelas: los menores que participen en ellos, ya sea como fuerza de asalto, ya sea como posible baja, necesitarán llevar una autorización paterna a la escuela. “Ha llegado el momento de ponerle freno de una vez por todas a una de las mayores lacras de este país”, decía el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, este martes al anunciar esta nueva y polémica normativa que, según muchos, atenta contra la Segunda Enmienda y los derechos naturales de los ciudadanos americanos.
“Ni un tiroteo no autorizado por los padres más, ni uno”, insistió Biden en un discurso que ya se considera histórico.
La medida, que busca restringir tajantemente los tiroteos, se espera que marque un antes y un después en la violencia doméstica americana y deja claro que, si los padres dan el visto bueno al tiroteo, como se espera que suceda en muchos casos, “entonces, adelante, el tiroteo es legal”. “Si un alumno decide tirotear la escuela sin la autorización… entonces estará cometiendo un delito”, detallaba el presidente de los Estados Unidos.
Así, a partir del próximo 14 de octubre, tanto los menores que decidan organizar un tiroteo como los menores que asistan al mismo deberán recibir antes el visto bueno de sus padres y acudir al colegio con una autorización firmada. Los niños que por motivos de salud quieran ser excluidos de los tiroteos podrán presentar un justificante médico que certifique que, en su caso, está desaconsejado recibir disparos y, por tanto, podrán mirar la masacre sentados desde el banquillo, “aunque tendrán que soportar las burlas de sus compañeros como sucede en esos casos, lógicamente”.
“Con esto [la nueva normativa] yo creo que frenaremos este problema para siempre”, concluyó Biden.
Respecto a la adquisición de armas, el gobierno republicano ha querido dejar claro que la autorización paterna solo será necesaria para utilizar armas de fuego en “horario lectivo” y que para su adquisición solo seguirá siendo necesario enseñar un fajo de billetes arrugados en cualquier Subway que siga manteniendo la oferta “Sub + Sub” de “Sandwich de pollo + subfusil Skorpion vz. 61 + bebida grande por 10,95 dólares.”
Si el sistema de autorizaciones paternas no funciona, el país está dispuesto atajar la causa última de los tiroteos escolares y prohibir los niños de una vez por todas.
