Los grandes riesgos que se cernían sobre la economía española se han capeado mejor de lo esperado hasta ahora, pero el batacazo de España en Eurovisión cambia el escenario de forma irremediable. El alza del 1,9% del PIB queda truncada porque Blanca Paloma solo obtuvo 5 puntos del voto del público, un fracaso con el que los expertos no contaban. «Pensábamos que España iba mejor de lo que iba, nos pudo el optimismo», ha admitido esta mañana Paolo Gentiloni, comisario europeo de Economía.
«Tendremos que rehacer el informe de cero a la luz del nefasto resultado del pasado sábado», ha añadido.
«El análisis basado en modelos sugiere que la mejora de las perspectivas se debe al contrashock provocado por el descenso de los precios de la energía, pero eso nada puede hacer para contrarrestar el hecho de que Eaea no haya gustado», explican los economistas de la Comisión. La visión de un horizonte más despejado de lo esperado para España era casi generalizada en toda la Unión Europea, pero obtener solo 15 puntos deja a nuestro país en muy mal lugar «pese al talentazo demostrado en el escenario y en el mercado exterior».
La propia ministra de Hacienda, María Jesús Montero, se comprometía hace unos días a reducir el desequilibrio de las cuentas públicas españolas este año, pero se ha visto obligada a desdecirse también en las últimas horas. «Blanca [Paloma] estuvo hipnótica y vibrante, pero a veces una actuación impecable no es suficiente y Eurovisión no perdona; ahora toca esperar lo peor en lo económico, pero también ponerse a trabajar para probar suerte el año que viene», ha dicho esta mañana en la Cadena SER.
«Ya, ya eaea. Ay, ven a mí, niño mío, ya, ven a mí, niño mío, duerme a mi vera, que en mi pecho hay abrigo, abriguito pa tus pena, ya eaea, ya, ea, ea», se ha limitado a decir Blanca Paloma, responsable última de la debacle económica del país.
