Carlos Alcaraz batió a Daniil Medvedev este domingo y se alzó con el trofeo de Indian Wells, recuperando la primera plaza del ranking mundial. El tiempo que el joven dedicó a erigirse como campeón, tú lo pasaste tirado en el sofá con la mirada perdida frente a la pantalla del móvil, obviando que era el Día del Padre.
Fuentes cercanas al tenista confirman que Alcaraz llamó a su padre minutos después de ganar con el objetivo de felicitarlo, pues ni siquiera el estrés del partido lo distrajo de sus obligaciones como hijo. «Las victorias vienen y se van, un padre es para siempre», señalaba Alcaraz, haciendo gala de una sensibilidad de la que, al parecer, tú careces.
Pese a que en tu casa nunca pretendieron que te convirtieras en una primera figura del deporte, sino que te formaras emocionalmente «con un mínimo de empatía y de amor por los demás», parece que incluso esto era pedir demasiado. ¿Cuándo llamaste a tu padre por última vez? ¿Cuándo le dijiste ‘te quiero’? Alcaraz expresa su amor por su familia más veces de las que entrena.
Al cierre de la edición, se ha podido saber que el tenista, al ver que no salía de ti felicitar a tu padre, se puso en contacto con él y se inventó una excusa para que pudieras salir del paso un año más. Ni siquiera espera que se lo agradezcas.
