«Dicen que soy el demonio, pero eso es porque no han tratado con gente de la tele». Con estas palabras se quejaba esta mañana el diablo después de ver el trailer de la serie «Pobre Diablo», ya disponible en HBO Max, y en la que considera que aparece «ridiculizado, y más si se compara con la reverencia y la pompa con la que se retratan las figuras de Dios o del Papa en películas y series».
«Al Papa lo interpretó Jude Law y a mí me ponen la voz de Ignatius. Creo que no hay más que añadir. Alguien está deseando vérselas conmigo aquí en el Infierno», señala el diablo, que lamenta que en «Pobre Diablo» salga retratado como alguien «incapaz de imponerse y dar miedo, cuando en El joven Papa tienes a un tipo carismático e inquietante».
«El Papa tiene a Sorrentino y a mí me han puesto a esos tres muertos de hambre, Joaquín Reyes, Ernesto Sevilla, Gakian… ¿Qué puto nombre es ese? Es nombre de dieta, no me jodas. Gakian… Es que me pongo de mala hostia, te lo juro», protesta.
El Maligno está también muy disgustado con la imagen que se proyecta de su retoño Stan. «Se meten con él porque es un nepobaby, pero que esperen a que madure un poco y provoque el armaguedón. Entonces me gustará verles. Y además les veré, porque aquí nos encontraremos, en el Infierno», promete.
El Diablo asegura que lleva días mandando correos a HBO Max para exigir una reunión con los guionistas. «Me toman por un loco más, pero lo llevan claro», dice. Amenaza con contratar al abogado del diablo. «A ver si con él se atreven a ponerse chulos», amenaza.
