Reivindicando su derecho a enseñar el pecho «no solo porque estamos en 2023, sino también porque estamos en nuestras propias casas», la Asociación Española de Padres sin Camiseta ha querido preguntar a la sociedad, y en especial a sus hijos, por qué tienen tanto miedo de sus tetas. «Parece mentira, con el calor que hace, que estemos aún con estos prejuicios y que no podamos estar en el sofá, comiendo sandía, con todo el jugo cayendo por el pecho al puro estilo Delacroix», ha explicado un padre sin camiseta, miembro de la asociación, que está harto de que, cada vez que sus hijos le ven sin camiseta en el salón, digan «ay, papá».
«Basta ya de doble vara de medir», insisten estos padres que se han unido al movimiento Free the Nipple, popularizado por feministas en Instagram. Según dicen, comparten con ese colectivo «la lucha por la liberación de los cuerpos, todos los cuerpos, especialmente en los meses de calor».
«Que nos miren mal por ir sin camiseta… a nosotros, que siempre tenemos gazpacho en la nevera», lamentan los miembros de la asociación. Y también denuncian que, cuando se les pregunta si planean pasarse «así» todo el verano, se les está juzgando y demonizando y que, en todo caso, «la respuesta es que sí».
«Papá, papá, papáááá», se han quejado los hijos adolescentes de los padres sin camiseta al llegar a casa del instituto con amigos y encontrárselos tumbados en el sofá en calzoncillos.
