La prensa ha podido saber que Alba García Mora, una anciana natural de L’Hospitalet de Llobregat, le robó el bocadillo a su nieto para dárselo a las palomas. Los hechos se produjeron en la tarde de ayer en el parque de La Florida, cuando abuela y nieto paseaban en dirección a los columpios. “La señora vio a las palomas y, en un acto reflejo, le quitó el bocadillo al niño y empezó a dárselo a los pájaros”, revela un testigo que se encontraba en la zona.
Las palomas enseguida se abalanzaron sobre la merienda del niño que, todavía con hambre, no pudo hacer nada salvo llorar. “Algunas palomas tenían mala leche y se comían el bocadillo mirando al crío de reojo”, explica otro testigo presencial de los hechos. La anciana se ha defendido de las críticas alegando que su nieto está algo rollizo y que los pájaros pasan hambre. La prensa maneja la información de que esta explicación no ha contentado a los padres, pero es un detalle aún por confirmar.
Lo que más dolió al nieto fue que se trataba de un bocadillo de Nocilla, un relleno que sus padres solo le ponen una vez cada dos semanas. “Si hubiera sido el bocadillo de queso o de salchichón de siempre me habría molestado menos”, se sincera el menor. “Siempre he sentido que mi abuela tenía preferencia por las palomas porque, entre otras cosas, me lo va diciendo cada día”, añade el niño.
No es la primera vez que la anciana protagoniza una situación semejante. Hace unos meses también fue sorprendida dándole a escondidas un billete de cinco euros a un gato callejero diciéndole “que no se entere tu padre”.
