«Como veáis. A mí realmente me pilla de paso». Con estas palabras se ofrecía esta mañana a «aprovechar el viaje» el viajero que lleva años planeando ir al pasado para matar a Adolf Hitler. Su idea era acabar también con Stalin, pero ahora considera que «igual es interesante también» evitar el nacimiento de Vladímir Putin «visto lo visto».
«El plan inicial era que fuera un viaje exprés, rápido y limpio, pero cada vez hay más personas al nivel de Hitler y creo que no puedo desperdiciar la oportunidad de encargarme de ellas también», razona el viajero. «Al final me tocará parar para comer, pero espero no tener que hacer noche», admite.
Algunos historiadores apuntan a la posibilidad de que la muerte prematura de Adolf Hitler altere el pasado de tal modo que no sea necesario liquidar a Putin. Sin embargo, como no pueden asegurarlo, el viajero se ofrece a «curarse en salud matando varios pájaros de un tiro», aunque con ello aumenten los riesgos de la misión.
«Lo que sí necesitaría es una respuesta rápida porque el combustible no deja de subir de precio y, si sigue así, pronto seré incapaz de costear el trayecto», ruega el viajero, que aprovecha para aclarar que «no voy a encargarme de Jeff Bezos porque todos los componentes de mi máquina del tiempo los he conseguido en Amazon y acabar con él destruiría el propio aparato. El capitalismo es así, lleno de contradicciones», argumenta.
