La Agencia Rusa de Información Nóvosti ha confirmado esta tarde la interrupción temporal del «proceso de desnazificación de Ucrania» motivada por una «decisión interna» del Kremlin. La tregua se debe, según se ha filtrado poco después, a la participación del presidente Vladímir Putin en un «taller de nuevas masculinidades».
«Putin se está revisando», confirman fuentes próximas al portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov, sin explicar los motivos de este cambio repentino de estrategia. Varios expertos atribuyen la nueva actitud a la frustración del propio Putin ante una invasión que se eterniza y que, quizá, ha llevado al mandatario a poner en tela de juicio su masculinidad tóxica.
Nadie había previsto este nuevo rumbo tomado por el Kremlin, que parece indagar ahora en «nuevas formas de convencer, más que de vencer, mediante recursos como la empatía, la resiliencia y la capacidad de escuchar al otro». Esta tesis no ha sido confirmada aún por el gobierno ruso, pero Estados Unidos sí ha recibido informaciones sobre «posibles videoconferencias que se estarían llevando a cabo entre Putin y varias responsables del Ciclo de Talleres de Género, Masculinidades e Igualdad de la Asociación Americana de Mujeres Universitarias».
«Si es verdad que Putin se deconstruye y renuncia a patrones de comportamiento propios del patriarcado, el fin de este enfrentamiento podría estar cerca», ha señalado la portavoz de la OTAN, Oana Lungescu, subrayando que «el feminismo es una lluvia fina de nuevas ideas que acaba calando incluso en los terrenos más áridos».
