Con la intención de «flexibilizar los criterios de la academia para que refleje los cambios graduales de la sociedad», el comité de expertos de la Caja Roja de Nestlé ha decidido finalmente permitir el ingreso en la institución del Maxibón, el helado de chocolate y galleta conocido popularmente como «Masibón». El dulce ocupará la letra M, ubicándose en el hueco de la caja situado justo después del Orange Supreme.
La decisión ha indignado a no pocos puristas, que ya protestaron cuando se aceptaron miembros que llevaban chocolate con leche. «Incluir productos posmodernos que ni siquiera pueden considerarse bombones es una traición al propósito de la Caja Roja, que no es otro que fijar y dar esplendor», denunciaba esta mañana desde Suiza Carlos Martínez Espinosa, maestro chocolatero.
«El que no lo quiera, que no lo coja», se limitan a decir los miembros de la academia, conscientes de que no podían seguir ignorando el clamor popular.
Ahora, el temor de los consumidores es que el Masibón «se venga arriba» con su inclusión en la Caja Roja y pierda precisamente su carácter popular. «Hasta ahora, solo quedaba Masibón. Si para probarlo tienes que comprar una caja de bombones entera, ya no sabremos qué pedir porque Calippo ya no queda», protesta la ciudadanía.
