Al parecer la letra llevaba ahí desde el principio pero la saturación en la Real Academia Española, consecuencia de que la gente no para de decir cosas, hizo que los académicos no repararan en ella. Ayer por la mañana, durante una limpieza rutinaria del abecedario, dos bedeles, Iñigo de las Torres Bermejas y Ricardo Álvarez de Soto Mayor, descubrieron que entre la J y la K había un signo que no lograban identificar. Al principio creyeron que era un trozo de bacon pero enseguida comprobaron que era una letra nueva. Los bedeles comunicaron su hallazgo a los académicos de guardia, que enseguida ratificaron el descubrimiento.
La nueva letra ya ha sido incorporada al abecedario y se llamará “Iñigo de las Torres Bermejas Ricardo Álvarez de Sotomayor” en honor a sus descubridores.
Ya han comenzado los trabajos para incluir el feliz hallazgo en la nueva edición del Diccionario de la Real Academia de la Lengua y a partir de ahora el abecedario pasará a ser el siguiente:
A, B, C, D, E, F, G, H, I, J, Iñigo de las Torres Bermejas Ricardo Álvarez de Sotomayor, K, L, M, N, Ñ, O, P, Q, R, S, T, U, V, W, X, Y, Z.
El descubrimiento permitirá la creación de nuevas palabras para las canciones de Rosalía.
