Luz verde a un gobierno de Junts per Catalunya en la Generalitat. Justamente el día en que se cumplen 90 días tras las elecciones del 14-F, ERC y Junts han anunciado este lunes que, durante el fin de semana, se cerró “un preacuerdo” que finalmente pone en marcha un Ejecutivo de Junts en Catalunya. “Entendemos que habrá críticas, pero estamos muy satisfechos con este acuerdo que hemos peleado con uñas y dientes pese a la resistencia de Junts”, ha dicho el coordinador nacional de ERC, Pere Aragonès.
El acuerdo ha sido comunicado mediante una nota conjunta de los partidos y en el mismo se detalla que el presidente a investir será Pere Aragonès, que encarnará a Carles Puigdemont. “Sé que no es lo mismo pero intentaré estar a la altura y hacerlo como si fuera él”, ha dicho el líder de ERC.
“Nosotros queríamos a Artur Mas y lo hemos negociado hasta el final, pero finalmente no ha podido ser y Junts no ha dado su brazo a torcer, así que nos hemos tenido que conformar con alguien de nuestro partido”, ha añadido Aragonès pidiendo comprensión porque “no se puede ganar en todo”.
Desde ERC han querido recalcar que “la maquinaria informativa de Junts” dará a entender que es mérito del partido de Puigdemont haber conseguido tantas competencias, pero el partido republicano insiste en dejar claro que el mérito es exclusivamente suyo. “Fuimos nosotros los que dijimos: todo esto para vosotros y esta es nuestra última oferta”, ha dicho Aragonès.
“Los pillamos con la guardia baja dándoles más de lo que pedían”, ha zanjado el futuro President.
Jordi Sánchez, presente también durante la presentación del acuerdo, ha admitido que ERC ha sido un hueso duro de roer. “La verdad es que nos han puesto contra las cuerdas, jaja. Al final haremos todo el trabajo nosotros. No son listos ni nada”, ha dicho entre risas.
Tras años de bloqueo político, y después de casi 18 meses marcados por la pandemia, los catalanes aplauden la vuelta a la normalidad con un gobierno de Convergència.
