Los retrasos en la vacunación de las reses impide celebrar unos Sanfermines cien por cien seguros para los animales, por lo que se ha decidido finalmente suspender los festejos, según ha informado el alcalde Pamplona, Enrique Maya. “El año pasado los toros estaban todos confinados y encerrados en casa y este año pensábamos que nos daría tiempo a vacunarlos pero no ha sido así”, comunicó ayer en una rueda de prensa.
“No podemos poner en riesgo la vida de los mozos que corren delante de los toros, ni de los propios toros. Sería una tragedia que murieran a causa del coronavirus y no por motivos naturales, como ser asesinado con una espada o ser arrollado por una manada de toros asustados”, explicó el alcalde, que dice que la decisión ha sido difícil.
“Lo estoy pasando bastante mal. No es una decisión que haya sorprendido, pero la salud y la seguridad de los toros es lo primero y teníamos que tomar esta decisión y la hemos tomado. Es una decisión dura, afecta a los sentimientos, afecta a los gigantes, afecta a miles de cosas… Por eso es tan dura esta decisión”, ha lamentado Maya, que no ha querido dejar de animar a la ciudadanía de cara a 2022: “El año 2022 vamos a vivir tres Sanfermines a la vez porque tanto los pamplonicas como los toros tenemos muchas ganas”.
El alcalde también ha pedido responsabilidad, especialmente en referencia a los encierros ilegales que muchos mozos, toros y toreros han organizado en el interior de bares y domicilios privados y ha recordado que ponerle mascarilla a los toros “no es suficiente” para garantizar la seguridad de todos.
