Continúan los procesos de fusión bancaria en España. Después de anunciarse las fusiones de Caixabank y Bankia y de Liberbank y Unicaja, llega el turno del Santander y el Banco Malo. Ana Botín, presidenta de Santander, ha confirmado hoy la creación de Santander Malo para impulsar el crecimiento rentable en Europa y en nuevos mercados. Será, según ha dicho, «la entidad bancaria más hija de puta de toda la historia de la economía».
El fondo para la reestructuración de los activos financieros y el Santander, «que nunca fue un santo», en palabras de Botín, se unen ahora para hacer el mal y prometen desplegar por toda España, en menos de un mes, «una red de oficinas que te cobrarán solo con que pases por delante de ellas, aunque ni siquiera entres ni hagas ninguna operación».
«Cobrarte por tener dinero, esta es la máxima de Santander Malo», explicaba esta mañana Patricia Botín, describiendo la operación como «un proceso de depuración y consolidación de la hijoputez bancaria que nos permitirá alcanzar cotas nunca antes vistas y comisiones que nunca nadie pensó que se podían cobrar».
Sin saber cómo ni por qué, miles de ciudadanos descubrirán en breve que son titulares de varias tarjetas de Santander Malo -Santander Malo Business, Abuse Gold, Santander Joputa Express o Precari@ Joven Debit-. Se darán cuenta de ello cuando se les empiecen a cobrar comisiones de mantenimiento.
«Hemos creado el concepto ‘existence commission’, es decir, cobrar a la gente simplemente por existir, por estar en el mundo», agregaba la presidenta de la nueva entidad. Botín también ha adelantado que el control que ejercerá el Santander Malo en las empresas y los órganos de gobierno será «implacable», pues «lo que hemos hecho hasta ahora era solo el principio, ahora empieza lo bueno. O, mejor dicho, ahora viene lo malo».
