Unas horas después de que se llevase a cabo con éxito el aterrizaje del rover Perseverance en la superficie de Marte, y tras comprobar que aparece un dedo en todas las fotos que hace, la NASA ha entendido que haberle puesto brazos al robot no ha sido una buena idea. “Queríamos humanizarlo, pero ahora que no se ve nada asumimos que nos hemos equivocado”, se sinceran desde la agencia espacial.
El Perseverance está dotado de una cámara desechable y unos brazos, con los que va sacando fotos de la superficie del planeta rojo. “También le hemos puesto una gorra y un mapa para que simbolice bien la exploración humana”, explican desde la NASA. El problema de todos estos ‘gadgets’ es que afectan al resultado de las fotografías realizadas. “No debimos hacer nada de eso, pero ahora ya es tarde porque el robot está muy lejos”, lamentan.
Por si fuera poco, además del molesto dedo en todas las fotos, los marcianos que han sido inmortalizados salen con los ojos cerrados. “Es muy difícil estudiar a esos seres extraterrestres así, a ciegas”, reconoce la NASA. “Igual debimos enseñar al Perseverance a decir patata, pero no pensamos que fuera necesario”, expresan.
Ahora, la agencia espacial tendrá que enviar al rover Photoshop para que pueda arreglar las fotos del rover Perseverance mientras ambos son observados por el rover Curiosity.
