Ignorando por completo la enorme bola de fuego que se aproximaba a la Tierra y juntándose con sus familias para celebrar la Nochebuena. Así es como desaparecieron los dinosaurios del planeta, según muestran las evidencias recogidas por los paleontólogos, es decir, los fósiles de espumillones, bolas decorativas, matasuegras y envoltorios de polvorones que se encuentran alrededor de todos los huesos de dinosaurios. “Si hubieran hecho caso del meteorito y hubieran buscado refugio no se habrían extinguido, pero le quitaron importancia”, explica Cecilia Comfs, una paleontóloga de la Universidad de Bonn.
“¿Cómo pudieron ignorar las señales de que el mundo se acababa y celebrar la Navidad como si eso, y no su supervivencia, fuera la prioridad?”, explica Comfs, insistiendo en que ese comportamiento muestra que los dinosaurios son, o eran, “el animal más profundamente subnormal que ha pisado el planeta Tierra”.
“Nadie en su sano juicio se juntaría con sus familias en el Apocalipsis, excepto los dinosaurios”, añade.
Según los paleontólogos, si los dinosaurios hubieran tenido “cuatro dedos de frente” podrían haber sobrevivido al impacto del meteorito sin problema.
Algunos micrófonos fosilizados en grupos de 30 o 40 individuos también han dejado claro que, momentos antes del impacto del asteroide, había dinosaurios celebrando “open mics” de comedia.