Aunque podría quedarse disfrutando de su merecido retiro en los Emiratos Árabes Unidos, el compromiso con la democracia de Juan Carlos I es tan fuerte que, nada más ver que Donald Trump amenaza con impugnar las elecciones de Estados Unidos si no gana, el Rey emérito de España ha cogido un avión y ha viajado de urgencia para volver a salvar la democracia.
Recordando a aquel joven sin miedo a nada que salvó a España del fascismo en la década de los ochenta después de ser nombrado Rey por el dictador fascista del país, Juan Carlos de Borbón se ha vuelto a poner la corona y la capa y en estos momentos ya se dispone a mediar entre republicanos y demócratas para evitar un posible golpe de Estado en Washington. “Estoy un poco oxidado, pero creo que todavía recuerdo cómo se hace”, ha reconocido a los miembros de su equipo.
El monarca ya ha salvado diez veces la democracia en los últimos 40 años. Quizás por eso ha confesado a su gente más cercana que este será su último trabajo. “Yo no puedo seguir salvando la democracia constantemente, tienen que venir nuevas generaciones de reyes a hacerlo”, ha dicho quizás refiriéndose a su hijo Felipe, que de momento no ha salvado la democracia ni una sola vez.
Al cierre de la edición, según ha podido informar la prensa estadounidense, Juan Carlos I ha llegado a tiempo a Washington D.C. y ha conseguido llevarse a la democracia en brazos justo antes de que explotara La Casa Blanca.
