Después de decretar el estado de alarma y el toque de queda en España, limitando las salidas a la calle entre las seis de la mañana y las once de la noche y prohibiendo las reuniones de más de seis personas, esta mañana el Gobierno ha aclarado que las fiestas de 150 personas están permitidas siempre y cuando se le invite. “Lo que no se puede es reunirse sin avisarnos a nosotros”, reconocen desde el Ejecutivo.
Pedro Sánchez y Salvador Illa se han mostrado dispuestos a dialogar con la ciudadanía para que las medidas tomadas en los últimos días no sean demasiado estrictas. “La cosa es fácil, si tú quieres hacer una fiesta, nos pegas un toque, nos invitas, lo pasamos guay y aquí no pasa nada”, explica el presidente. “Nosotros llevamos hielo y cervezas, pero lo que no puede ser es hacer una fiesta y no invitar a los miembros del Gobierno”, razona el ministro de Sanidad. «Nos votaras o no, eso es de rancios», insiste.
Desde el Gobierno aclaran que, si la fiesta es muy buena, incluso se podrá prescindir de mascarillas y distancia de seguridad. “Una cosa es la prevención y otra la paranoia”, reconoce Illa. “Si nos lo estamos pasando bien, hay buen rollo y la fiesta que has organizado es de nivel, no vamos a estar ahí sin tocarnos, vamos, digo yo”, añade el ministro de Sanidad. “Lo que no se puede hacer es ir organizando fiestas cutres, porque a esas no vamos a ir y las vamos a perseguir”, asevera.
El Ejecutivo también ha aclarado que el toque de queda es obligatorio para todos los españoles excepto para los que pasean habitualmente con Pedro Sánchez. “Hombre, no vamos a dejar que nuestro presidente salga a la calle de madrugada totalmente solo”, aseguran.
