Acudir hoy a un supermercado esperando encontrar en él ministros, vicepresidentes o incluso algún portavoz es tarea imposible. Más de tres millones de españoles han decidido hacer su propio Gobierno en casa, descontentos como estaban con el actual Ejecutivo y viéndose capaces de hacer uno mejor ayudándose de tutoriales y explicaciones disponibles en internet.
«Las bases de un Gobierno no son tan complicadas, a no ser que pretendas liarte a montar un Estado Autonómico. Si te conformas con un Ejecutivo que represente a todos los de tu familia y que sirva para gestionar con eficacia esta crisis, lo único que necesitas es tiempo y un buen equipo», comenta Ricardo Friselgas, de Burgos, que presidía esta mañana su primer Consejo de Ministros en el marco de una coalición entre las derechas y la izquierda radical, representada por sus hijos Jorge y Marina. «Con voluntad y teniendo claras las prioridades, todo se puede», dice. Y asegura que ahora, con su propio Gobierno de España casero, «se ha notado un gran cambio y hay más cercanía con el ciudadano, más capacidad de reacción y sobre todo más certidumbres».
Las primeras familias que se han animado a hacer su propio Ejecutivo coinciden al señalar que lo más difícil de controlar son «las ansias de autogobierno de los niños», que muchas veces basta con apaciguar con el buen funcionamiento de los grupos parlamentarios en el hemiciclo -o, en su defecto, un rincón del salón en el que el sofá y la butaca se disponen en forma de cuña, con un taburete entre ellos que hace las veces de estrado-.
«Ser ministro no es fácil, ahora mis tres hijos están todo el día de reuniones, se acabó el aburrimiento aquí», certifica Cecilia Barahona, ama de casa y presidenta de su Congreso. «Hay alboroto en los plenos, pero aquí nadie le atribuye muertos a nadie ni se dicen barbaridades guerracivilistas», asegura la mujer, agregando que el suyo es «el Ejecutivo del mundo con más Fernández-Manchón de la historia».
El Gobierno oficial calcula que en estos momentos hay más de tres millones y medio de Ejecutivos en España, aunque muchos gobiernos caseros ponen en entredicho esta cifra, que podría ser mayor. «La democracia es el poder del pueblo y el pueblo se está dando cuenta de que, si quiere las cosas bien hechas, las tiene que hacer uno mismo», sentencia Francisco José Manublas, ministro de Útiles de Cocina y Electrodomésticos de un Gobierno de España de Reus.
