Durante las próximas semanas, miles de estudiantes universitarios abarrotarán las bibliotecas con portátiles, libros, libretas y pilas de apuntes a fin de pasarse horas mirado el móvil preparando los exámenes del primer semestre. De hecho, a partir de hoy mismo y hasta el 9 de febrero, algunas bibliotecas públicas de la Comunidad de Madrid abrirán ininterrumpiamente las 24 horas del día siete días a la semana para aquellos estudiantes que quieran mirar Facebook, Whatsapp y Twitter de forma intensiva.
“Es muy duro pasarse tantas horas en la biblioteca mirando el móvil e ignorando los kilos de libros y apuntes que hemos traído, así que muchos tiramos de café”, explica Sara Fundeu, estudiante de Ingeniería Industrial que piensa pasarse los próximos días chateando.
“Hay tanta información que lo mejor es hacer esquemas”, explica esta alumna en referencia a los grupos de Whatsapp en los que está. Según dice, lo importante es acudir a la biblioteca cargada con todos los apuntes a los que poder echar un vistazo rápido cuando se canse de tanto móvil.
“A veces te lías y subrayas el móvil”, explica otro estudiante que no descarta pasarse los exámenes mirando también el teléfono e ignorando las preguntas.
