Elvira Fernández, casada con el presidente del Gobierno desde 1996, ha admitido a su entorno más íntimo que sigue buscando excusas cada vez que Mariano Rajoy propone quedar con sus padres para conocerlos.
Intentando mantenerse al margen de las apariciones públicas, Fernández se limita a comentar a su familia que está con alguien pero que prefiere no traerlo a casa «porque luego las parejas rompen y ya se han creado lazos y es una pena para todos».
No saben que su marido es quien les bajó las pensiones
La realidad, sin embargo, es que la mujer siente profunda vergüenza cuando piensa en la idea de presentarse en casa de sus padres con el presidente del Gobierno y líder del Partido Popular, «y más con el tema de las pensiones, que a ellos les afecta directamente». Insiste en que «no sé cómo reaccionarían» y prefiere esperar a que su esposo «encuentre un trabajo más estable, que no dependa de lo que ocurra cada cuatro años, y siente la cabeza».
La versión de Mariano Rajoy, según ha podido saberse, es bien distinta: «Mi agenda es complicada y, cuando encuentro un hueco, siempre coincide con que ellos tienen un viaje o algún compromiso. Estas cosas hay que hacerlas bien, con tiempo», explica el mandatario.
«A la gente le cuesta entender que estés con el presidente, y más con Rajoy en concreto. Muchas veces he oído a mi padre hablar mal de él y comentar que le diría cuatro cosas. No quiero que le diga cuatro cosas porque conozco a mi marido y sé que no entendería nada», argumenta Elvira Fernández.
Al cierre de la edición, fuentes de Facebook han confirmado que el apartado sentimental de la esposa de Rajoy en estos momentos «es complicado».
