Esta noche, mientras FC Barcelona y Deportivo hagan ver que disputan un partido en Riazor para el que ya se han agotado las entradas, un hombre desnudo saltará al terreno de juego provocando una falsa situación de alarma y enloqueciendo al público. Se desconoce en qué momento del encuentro irrumpirá, aunque muchos esperan que sea durante la primera parte para poder regresar pronto a casa. El técnico blaugrana Pep Guardiola lamentó que el exhibicionista que utilizó el Barcelona en anteriores ocasiones se mostrase «lento, previsible y con el espíritu encogido», algo que «sucede a veces cuando te sometes a tanta presión y hace algo de frío».
«No nos conformamos con un exhibicionista cualquiera que salga corriendo y al que se le balancee el pene», explicaba Guardiola ayer en la rueda de prensa de después del entrenamiento -en el que los jugadores ensayaron sus caras de sorpresa-. «Siempre hay que intentar hacer lo mejor porque es así como nos hemos ganado el respeto, y el respeto hay que seguir ganándoselo. Hemos intentado que nuestro hombre desnudo reduzca michelines, sea más flexible por la banda y, por tanto, más difícil de atrapar».
Hasta donde puede saberse, el programa que se espera para esta noche es el siguiente:
1. Los jugadores salen al campo fingiendo normalidad. Un figurante vestido de árbitro lanza una moneda al aire y se escoge cuál de los dos equipos tendrá el saque.
2. Se inicia el encuentro, el público hace ver que está interesado y se emplean cánticos para animar al exhibicionista, intentando que se cuele pronto al campo.
3. En algún momento indeterminado del partido el exhibicionista saltará al terreno de juego y correrá por la banda. Se espera que recorra doscientos metros y consiga agarrar el balón con las manos.
4. Algunos jugadores sonreirán con complicidad, otros esbozarán un falso gesto de disgusto y mirarán hacia los lados, generando momentos de suspense antes de la inminente escena de persecución.
5. Varios policías perseguirán al infractor en lo que será el gran momento de la noche.
6. Es imprevisible qué pueda pasar entonces, como es lógico. Muchos esperarán un gran final como el de julio de 2007, en el que el exhibicionista acabó entrando en la portería y se agarró a la red mientras le daban caza.
7. Sea cual sea el desenlace, una vez se capture al hombre desnudo se concluirá con el consabido «paseillo triunfal» por el campo hasta los vestuarios. Se ignora si le intentarán tapar con una manta o una gabardina.
8. Como mero acto protocolario, los jugadores reanudarán el partido y continuarán jugando mientras el público abandona el campo tras el espectáculo.
