Diciendo que es mejor hacerse a la idea de que los datos de Facebook van a estar ahí “para siempre”, el CEO de la red social más importante del mundo, Mark Zuckerberg, ha admitido esta semana que es imposible darse de baja de la plataforma y que él mismo lo ha intentado “a un coste personal muy alto y poniendo en peligro todo lo que amo y todo lo que soy” sin lograrlo.
“No se puede… no se puede salir, que Dios me perdone”, ha dicho Zuckerberg con la voz temblorosa y con el rostro muy pálido.
“Yo mismo intenté salir y acabé en zonas de Facebook donde ningún humano debería adentrarse, zonas que yo mismo no conocía que existieran”, ha explicado al detallar qué ocurre cuando un usuario intenta eliminar su cuenta y los datos relativos a la misma.
“El algoritmo lo sabe todo de ti y te muestra todos tus miedos más profundos a fin de que no avances en el proceso de baja y te quedes para siempre”, ha explicado Zuckerberg, culpando al algoritmo (“es demasiado poderoso”) de la fuga de datos.
“Que nos asista a todos”, ha sentenciado el responsable de Facebook para concluir, reconociendo que no sabe para qué quiere el algoritmo todos esos datos pero es mejor no resistirse y “darle lo que pide” o será peor.