Tras miles de años repartiendo paciencia a todo aquel que se lo pedía, Dios Nuestro Señor ha anunciado a través del Papa Francisco que en este año 2024 no dará más. “El Creador está harto de dar paciencia a los demás”, ha explicado el sumo pontífice durante la última Misa del Gallo.
Los representantes de Dios en La Tierra avisan de que, de ahora en adelante, los que necesiten paciencia tendrán que autogenerarla, ya sea respirando hondo o tomando medicación. “Tanta gente pidiéndole paciencia le desespera y hace que se le agote”, reconocen desde la Ciudad del Vaticano.
Según los teólogos consultados, cuando Dios creó el Universo fabricó 300 millones de toneladas de paciencia, pero ahora, después de 2000 años, sus reservas empiezan a estar muy vacías y ya no tiene paciencia ni para sí mismo. “Se le está acabando la suya”, lamentan. “Vivimos un momento muy delicado porque, cuando se le agote, puede ser muy peligroso”, alertan.
Desde el Vaticano han pedido a los fieles que tengan paciencia con el Señor, pero los fieles se han quejado de que no pueden tener paciencia si Dios deja de repartirla, por lo que la situación parece estar lejos de solucionarse.