Pronto se cumplirán cien años del nacimiento de Gloria Fuertes en el popular barrio madrileño de Lavapiés. Nadie como ella supo dominar el juego de palabras y la fuerza de la ingenuidad. Seleccionamos diez estrofas con versos de la escritora que todos deberíamos conocer.
Soy una taza, una tetera
una cuchara y un cucharón
un plato hondo, un plato llano
un cuchillito y un tenedor.
Ahora soy un chicle: rum, rum, rum.
Ahora soy pez: shh, shh, shh.
Ahora soy la nube: fff, fff, fff.
Ahora soy un tren: chu, chu, chu.
Todas las brujerías
del brujito de Gulubú
se curaron con la vacú
con la vacunaluna lunalú.
Taza, tetera, cuchara, cucharón
plato hondo, plato llano, cuchillito, tenedor
salero, azucarero, batidora, olla express.
Dicen que los leones son malos, malos, malos
y yo soy muy buenita qué le voy a hacer.
Una mosca que viene volando
se para en un trozo,
da vuelta en un trozo.
Soy una taza, una tetera
una cuchara…
Cucú, cucú,
cantaba la rana,
Cucú, cucú,
debajo del agua.
Cucú, cucú,
pasó un marinero.
Cucú, cucú,
llevando romero.
Ya mis manos se despiertan
y ten van a saludar,
se sacuden con gran fuerza
y después se enrollan de aquí por allá.
Soy un puto utensilio de cocina
cómo se te queda el cuerpo.