El cantautor estadounidense Bob Dylan, ganador del Nobel de Literatura de este año, no viajará a Estocolmo a recoger el premio, que se entrega el próximo 10 de diciembre, informó este miércoles la Academia Sueca. El motivo es una cita que ya había acordado el premiado con el técnico del gas, que debe revisar su caldera.
«Los inyectores están sucios y el agua sale templada pero no caliente», ha argumentado Dylan, añadiendo que «el reconocimiento público de mi trayectoria es importante pero, cuando tienes que ir a casa del vecino a ducharte, reordenas tus prioridades».
El artista ha explicado a la Academia que el técnico del gas está «muy solicitado, más que yo con el Nobel» y ha animado a la organización a perseguir a la compañía del gas para que busque otra fecha. «Intentadlo si queréis, os pondrán en espera», asegura.
«No es que me dé pereza ni nada. De hecho, con la caldera jodida estoy seguro de que hace más frío en mi casa que en Estocolmo», ha insistido el premiado. «Y recemos todos para que el tío del gas se presente el día que toca, que esa es otra», ha añadido.