«Sé que es un tema sensible y que puede levantar ampollas, pero es importante volver a ponerlo sobre la mesa cuanto antes», le dijo anoche un preocupado Alberto Ruiz Gallardón a su amante, embarazada desde hace algunas meses.
El ministro, que valora que «el futuro de muchos está en juego», aprovechó un silencio durante los cafés, tras una cena romántica que había cocinado ella para él, para toser y empezar a decir «respecto a aquello del aborto…».
Pese a que el ministro y la chica de 27 años a la que visita con asiduidad desde abril ya habían mantenido conversaciones sobre el tema «de la interrupción del embarazo», todas han sido infructuosas hasta el momento. Por este motivo, y porque, tal y como él mismo dijo, «nos quedamos sin tiempo y hay que decidirse, cariño», Gallardón se vio obligado a volver a insistir en el controvertido tema.
A última hora de la noche, Gallardón trató de convencer a la mujer de aprovechar y hacer «una escapadita romántica a Londres este otoño, ¿qué te parece?».
