Diciendo que quería «leerlo con calma», Juan Astier, CEO de una empresa de publicidad, ordenó a su secretaria que le imprimiera un email para tenerlo en papel, según han informado fuentes de la agencia de publicidad IPG.
Tras leerlo durante unos minutos, el ejecutivo pidió a la misma secretaria que lo escaneara para tener una copia digital del mensaje «porque el papel luego se pierde y hay que tenerlo todo informatizado».
«Es demencial, tenía el email delante», ha explicado a la prensa la secretaria, sumamente confusa. «¿Por qué no podía leerlo directamente en la pantalla? ¿Qué se lo impedía? Mira, es que no llega ni a media página», ha añadido.
Tras disponer del PDF que contiene el email impreso y posteriormente escaneado, el ejecutivo ha pedido a la secretaria que se lo envíe vía email «para poder leerlo en el iPad con calma».
Al cierre de la edición, Astier ha ordenado a su secretaria que le transcriba el email a Word. «El documento escaneado está en PDF y no se puede seleccionar texto; lo quiero todo en Word que es más versátil y moderno. Al fin y al cabo, somos una empresa nativa digital y hay que ir adaptándose a esta nueva realidad, que es el presente, no el futuro».