Esta mañana, el líder popular Mariano Rajoy -acompañado de la portavoz del PP, Soraya Sáenz de Santamaría, y de varios representantes de la empresa Mattel- ha presentado en la sede central del partido el que será, en sus propias palabras, «el juguete estrella de estas navidades». Fruto de un acuerdo entre el partido y la multinacional californiana, el próximo día nueve de diciembre saldrá a la venta, sólo en España, una versión de la muñeca Barbie que reflejará, según Sáenz de Santamaría, «la estética, el estilo y la actitud de la mujer española que encarna ideales de centro y que representa el futuro que queremos para nuestro país».
El juguete es una síntesis de los rasgos característicos de las votantes del partido y, si tiene el éxito previsto, pronto se verá reforzado por la comercialización de Borja, una versión masculina que incluirá camisa de color con cuello blanco, corbata amarilla y un jersey de la marca Burberry atado al cuello.
El Partido Socialista ha tildado la muñeca de «flagrante manipulación ideológica de la infancia», pero el PP ha replicado que «empezaron ellos con los Lunnis, claramente inspirados en Manuel Chaves».
Frente a la sorpresa que ha provocado el nuevo juguete, Rajoy ha querido aclarar que «una cosa así en los Estados Unidos es lo más normal del mundo» y ha recordado la existencia de unos cereales con la imagen de Barack Obama. El líder de la oposición ha aprovechado para comunicar también el posible lanzamiento de unas galletas de la marca Nabisco tituladas «Chips Rajoy», advirtiendo que «esto es sólo el principio».
La vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, ha expresado sus dudas respecto a la legitimidad política de la Barbie del PP. Ha sugerido también a los populares «que piensen en una adaptación del Monopoly en la que los jugadores puedan dedicarse a destrozar Valencia como han hecho ellos en la vida real». Mariano Rajoy no ha tardado en responder que «estamos pensando en regalar al Gobierno una maqueta del pesquero Alakrana, aunque si juegan a pagar secuestros les saldrá caro el juguetito». Fernández de la Vega ha contraatacado de nuevo afirmando que «para maquetas de barcos, la del Prestige». Soraya Sáenz de Santamaría ha asegurado que iba a apuntar todas estas ideas porque le parecían buenísimas.
Fuentes del Partido Popular aseguran que, desde la presentación del juguete, se están recibiendo numerosas peticiones por parte de los ciudadanos y de algunos comercios españoles. «Quisiera tenerla ya en mis manos para poner su brazo en alto y desnudarla», ha reconocido un militante anónimo del partido.
