El Partido Socialista quería homenajear a sus militantes de Estados Unidos organizando un almuerzo popular en la joyería Tiffany & Co. de Nueva York. El establecimiento ha mandado la siguiente nota a la presidencia del partido: “Hemos de reconocer que no disponemos de la infraestructura adecuada para organizar una costillada popular; tampoco sabemos qué es un botijo, por lo cual lamentamos no poderlos complacer”. Jesús Caldera, Secretario de Ideas y Programas en la CEF del PSOE, ha reconocido que fue un error infantil: “Me sonaba lo de ‘Desayuno en Tiffany’s’ y pensaba que era un bar”.
Algunos afiliados, indignados con la firma neoyorquina, ya han propuesto un boicot a sus productos. “Vale, es una joyería, pero tienen un local grande y no les costaba nada montar un almuerzo popular para los compañeros y compañeras del partido”, se quejan. “Proponemos no comprar ninguna joya, diamantes ni relojes de su catálogo, así aprenderán” ha declarado Nacho, un socialista madrileño. “Vetaremos la película en los videoclubes de España”, añadía Juan Carlos, “esta gentuza no merece que se la promocione en nuestro país después de cómo nos han tratado”.
Jesús Caldera, por su parte, quiere quitar hierro al asunto y “pasar página”. “Hay que mirar al futuro”, declaró. Ya están tratando de contactar con el escritor William S. Burroughs para organizar un almuerzo de socialistas desnudos. Cuando un periodista le informó de que el escritor falleció en 1997, Caldera se enfureció: “¿Dice que murió? ¡Mierda! ¿Es que no nos van a dejar almorzar en ningún sitio?” soltó indignado.
